Seis centros escolares de la Serra de la Tramuntana, en colaboración con el proyecto Biotramuntana, se han puesto a trabajar conjuntamente con el objetivo de concienciar sobre la importancia de los polinizadores a través de acciones concretas y reales en sus instalaciones. Para ello han firmado un convenio de colaboración con el objetivo de promover la restauración y creación de huertos ecológicos, fomentando la conservación de los insectos polinizadores y la biodiversidad.
El acuerdo busca sensibilizar a la comunidad educativa sobre la importancia de los polinizadores y la seguridad alimentaria, transformando los espacios escolares en entornos más sostenibles y pedagógicos. Por ahora se han restaurado 4 huertos escolares y se han creado 2 nuevos, se han instalado hoteles de insectos que son estructuras diseñadas para refugio de los insectos beneficiosos, y se han plantado numerosas especies de plantas polinizadoras, todas ellas autóctonas de Mallorca.
Casi 500 alumnos han participado hasta ahora en estas actividades que incluyen acciones formativas, charlas, coloquios y la entrega de material didáctico sobre esta temática y la difusión del documental “mecanismo invisible” sobre la importancia de las abejas en el mundo.
Además, los productos recolectados en los huertos se usan para la comida de los alumnos en los propios centros o se distribuyen entre los alumnos que colaboran completando el ciclo de la plantación, recolección y consumo de productos sostenibles y de kilómetro cero.
A lo largo de 2025 se seguirán con las actividades del proyecto que han tenido una gran acogida entre los centros escolares y que han servido para impulsar las actividades pedagógicas relacionadas con el medio ambiente y con la sostenibilidad alimentaria.
Los centros educativos que han participado han sido el CEIP Llorenç Riber de Campanet, el CEIP Bocchoris de Pollença, el IES Guillem Colom Casasnoves y el CC Sagrats Cors de Sóller, el CEIP Gaspar Sabater de Palmanyola (Bunyola) y el CEIP Pere Rosselló Oliver de Alaró.